1º de MAYO
Para la Confederación General del Trabajo cada 1º de mayo es tiempo de reflexión. De evocar las grandes gestas del movimiento obrero organizado, desde el 17 de Octubre, la década de la revolución social, la lucha por el regreso de Perón y la resistencia a la dictadura. Precisamente al cumplirse un nuevo aniversario del primer paro nacional contra la dictadura cívico militar genocida llevada a cabo el 27 de abril de 1979, reivindicamos a todas las trabajadoras y trabajadores dirigentes o no que dieron su vida luchando en defensa de sus derechos y de la democracia durante la época más oscura de la Historia Argentina.
Es preciso recordar también la gesta de los trabajadores que entre el 24 de marzo y el 27 de abril realizaron más de 260 paros y protestas que desembocaron en el paro y la movilización del 30 de marzo de 1982 marcando el principio del fin del proceso militar.
Con la recuperación de la democracia de la que fuimos protagonistas, todos los argentinos volvieron a gozar de los derechos civiles y políticos. Pero a los trabajadores no se nos devolvió ninguna de las conquistas cercenadas por el régimen dictatorial.
Siempre es bueno destacar que fueron los trabajadores (con excepción de algunos dirigentes) quienes resistimos el neoliberalismo de los 90 que venía a completar el plan de Videla y Martínez de Hoz. Resistimos las privatizaciones, resistimos la flexibilización laboral, fuimos estigmatizados por negarnos a aceptar el fin de la historia convencidos que la Argentina justa libre y soberana que construyeron Perón y Evita no era una utopía ni una quimera sino la solución para el futuro del país.
Por ello con total convicción compartimos el camino que condujo Néstor Kirchner a partir del 25 de mayo del 2003, y es así que con la misma entrega salimos a la calle a defender el Proyecto Nacional y Popular que fue amenazado por una asonada destituyente.
El particular momento de fricciones y roces institucionales que hoy vive la CGT con el gobierno fruto de las pasiones y convergencia de intereses encontrados no puede cerrar el diálogo social. Los procesos de transformación en muchos de los países de la región han provocado tensiones o realineamientos.
Argentina no es la excepción. Porque la CGT al defender empleos, salarios y los derechos sociales de la clase trabajadora, actualiza su papel relevante, no sólo en materia reivindicativa, sino en la dimensión política que ganó al calor de las luchas desde el nacimiento mismo de la clase obrera. Este 1º de mayo ratificamos los reclamos que venimos haciendo: el dinero de las Obras Sociales, la eliminación del impuesto al trabajo, la universalidad de las asignaciones familiares, el trabajo no registrado y las paritarias libres.
Lo hacemos desde la razón y porque somos consecuentes con los valores y principios de lo que representamos y porque los trabajadores argentinos hemos luchado y seguiremos luchando hasta alcanzar la justicia social.
Nuestra meta es como siempre una PATRIA GRANDE y un Pueblo Feliz.
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