Mientras Hugo Moyano analizará hoy con sus aliados llamar a un nuevo paro antes de las elecciones de octubre, gremios de la CGT oficialista que mantienen una relación tirante con el Gobierno analizan sumarse a la protesta. Son los casos de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) y de La Fraternidad, dos de los sindicatos del transporte afectados por el impacto de Ganancias y cruzados por conflictos.
El jefe de la UTA, Roberto Fernández, blanqueó su intención de sumarse a una posible huelga. "El reclamo de Moyano es justo y claro. Y si es justo tenemos que avalarlo. No voy a incorporarme a su CGT, pero si llama a un nuevo paro, podríamos adherir", le dijo a este diario el secretario general de los colectiveros.
Fernández puso así de manifiesto negociaciones que hasta ahora se mantenían en reserva entre las versiones oficialista y opositora de la CGT, y que tenían como objetivo la reunificación de la central obrera una vez resueltas las elecciones legislativas de octubre. Esas gestiones podrán acelerarse con vistas a un posible nuevo paro del camionero y de los gremios que integran su CGT.
Fernández y Omar Maturano, del gremio de los maquinistas de trenes, son los dirigentes que más enojo manifestaron ante sus colegas en las últimas reuniones de la central que lidera Antonio Caló. Maturano, de hecho, pasó a ser un sindicalista señalado por el Gobierno luego de la paralización ferroviaria de la semana pasada, que terminó con incidentes en la estación de Constitución.
Incluso, Moyano llamó a Maturano para transmitirle su solidaridad luego de que fuera denunciado penalmente por el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo. Aunque no prevén integrarse a la CGT del camionero -al menos antes de las elecciones de octubre- ambos son los mayores candidatos a sumarse a una posible huelga nacional.
Los gremialistas integran dos grupos internos en los que pisa fuerte el taxista Omar Viviani, alineado al Gobierno. Son el Movimiento de Acción Sindical Argentino (MASA) y la Unión General de Trabajadores del Transporte (UGATT). Viviani, sin embargo, no logró hasta ahora aplacar el malestar de éstos y otros dirigentes que coincidieron en quejarse contra el Gobierno por la falta de respuesta a las demandas, en particular sobre Ganancias.
En tanto, Moyano reunirá hoy a las 15 el Consejo Directivo de su CGT, en la sede de Azopardo. Anticipó que abrirá el debate para el llamado a un paro en las próximas semanas, luego del que realizó su gremio, de los camioneros, este lunes con una marcha a la Plaza de Mayo.
POR MARIANO MARTIN AMBITO FINANCIERO
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